Parte 1, Artículo

Hay vida más allá de correr y levantar pesas

Hay vida más allá de correr y levantar pesas
¡Revelando el importante papel de la flexibilidad en supervivientes de cáncer! 
 
Si bien la influencia del entrenamiento físico en supervivientes de cáncer está bien documentada, es crucial profundizar en los aspectos de la condición física relacionada con la salud (p. ej., la capacidad cardiorrespiratoria, la fuerza y resistencia muscular, la composición corporal y la flexibilidad). Los tratamientos contra el cáncer pueden limitar la amplitud de movimiento, limitando así las capacidades físicas debido a procedimientos quirúrgicos que pueden dejar cicatrices y daño tisular. En este contexto, los ejercicios personalizados son indispensables. La movilidad y el estiramiento, método de entrenamiento utilizado para mejorar la flexibilidad, desempeñan un papel esencial al proporcionar un enfoque holístico para abordar estos desafíos. 
 
Flexibilidad para supervivientes de cáncer 
En 2010, un panel de expertos convocado por el Colegio Americano de Medicina del Deporte publicó las primeras pautas para desarrollar pruebas de ejercicio y prescripción adaptadas a supervivientes de cáncer.[1] El panel enfatizó que, además de las modalidades clásicas de entrenamiento aeróbico y de fuerza, los supervivientes de cáncer deberían incorporar ejercicios de flexibilidad en sus rutinas de entrenamiento. Más recientemente, un informe de Exercise and Sports Science Australia recomendó incorporar el entrenamiento de la flexibilidad para mejorar la capacidad de realizar actividades de la vida diaria con un menor riesgo de caídas, molestias, dolor o preocupación.[2] Además, para pacientes que están severamente desacondicionados o cerca del final de la vida, priorizar el entrenamiento de movilidad en su prescripción de ejercicio puede ser esencial. Estos ejercicios, que involucran movimientos específicos del cuerpo superior e inferior con carga externa mínima o nula, tienen como objetivo mejorar sistemáticamente la función cardiovascular y respiratoria, la fuerza y resistencia neuromuscular y la capacidad de flexibilidad según se considere apropiado.[2] 
 
Conclusiones 
La variedad es clave. La integración de movilidad, estiramiento y ejercicios complementarios podría maximizar los beneficios del entrenamiento. Se ha demostrado que combinar entrenamiento de fuerza, aeróbico y de flexibilidad amplifica los resultados positivos. 
 
 
Autor: Javier S. Morales; University of Cadiz. 
 
Fuentes
1. Schmitz, K.H.; Courneya, K.S.; Matthews, C.; Demark-Wahnefried, W.; Galvão, D.A.; Pinto, B.M.; Irwin, M.L.; Wolin, K.Y.; Segal, R.J.; Lucia, A.; et al. American college of sports medicine roundtable on exercise guidelines for cancer survivors. Med. Sci. Sports Exerc. 2010, 42, 1409–1426, doi:10.1249/MSS.0b013e3181e0c112. 
2. Hayes, S.C.; Newton, R.U.; Spence, R.R.; Galvão, D.A. The Exercise and Sports Science Australia position statement: Exercise medicine in cancer management. J. Sci. Med. Sport 2019, 22, 1175–1199, doi:10.1016/j.jsams.2019.05.003. 
 

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