¿Sabías que puedes comer… de manera sostenible?
“Con un simple cambio en la dieta, puedes ahorrar una tonelada de CO2 al año...” [1]
La mayoría de las definiciones de una dieta saludable se reducen a “una ingesta calórica adecuada de alimentos vegetales, bajas cantidades de alimentos de origen animal, grasas insaturadas en lugar de grasas saturadas y cantidades limitadas de alimentos procesados y azúcares añadidos” [2]. Y de hecho, existen muchas dietas modernas y populares que mejoran la salud y promueven la reducción de peso.
¿Qué es exactamente una dieta climatariana?
Sin embargo, recientemente se han introducido dietas saludables que también ofrecen beneficios planetarios al mostrar huellas de carbono más bajas. Estas son conocidas como dietas climatarianas. La dieta climatariana enfatiza la toma de decisiones sobre los alimentos que uno consume eligiendo opciones de bajo impacto. Más específicamente, en estas dietas se evitan alimentos que:
- Requieren grandes cantidades de recursos naturales, como tierra o agua.
- Contribuyen a la contaminación.
- Causan acidificación del océano.
- Emiten gases de efecto invernadero.
- Utilizan envases excesivos o no biodegradables [1].
¿Cómo salvan nuestras dietas climatarianas al planeta?
Para salvar nuestro planeta, nuestras dietas deben considerar el agua, las emisiones y el uso de la tierra. Una dieta basada en carne tiene casi el doble de la huella de carbono de una dieta vegetariana o vegana. Sin embargo, algunos alimentos vegetarianos o veganos, como aguacates y almendras, tienen una enorme huella de agua.
El principio cardinal de estas dietas de baja huella de carbono es la reducción del consumo de carne de rumiantes (ganado y ovejas) y alimentos procesados. El aumento en el consumo de carnes como pollo, cerdo y de frutas y verduras cultivadas localmente puede mantenerse sin afectar significativamente la huella de carbono. Así, realizar pequeñas y simples sustituciones en la dieta de todos puede considerarse una contribución efectiva para reducir el impacto ambiental y, al mismo tiempo, mejorar la salud y la longevidad.
Dieta mediterránea “amigable con el clima”
Entre las dietas “amigables con el clima”, la dieta mediterránea tiene un impacto ambiental comparativamente favorable. Su huella de carbono es inferior a la de las dietas keto y paleo, por ejemplo. Además, el consumo limitado de alimentos procesados en la dieta mediterránea también se traduce en un menor consumo de plástico y emisiones asociadas con el procesamiento, envasado y transporte de estos productos [3], haciendo que la dieta mediterránea sea totalmente compatible con la sostenibilidad [4].
Autora: Anna Gkriniari, CRE THI DEV
Fuentes:
[1] Climatarian–The Easy, Healthy, Climate Friendly Diet. [(accessed on 26 October 2022)]. Available online: https://climatarian.com/
[3] Dernini S., Berry E.M., Serra-Majem L., Vecchia C.L., Capone R., Medina F.X., Aranceta-Bartrina J., Belahsen R., Burlingame B., Calabrese G., et al. Med Diet 4.0: The Mediterranean diet with four sustainable benefits. Public Health Nutr. 2017;20:1322–1330
[4] Renunciation and Ostentation: A Jain Paradox–Jainpedia. Available online: https://jainpedia.org/reading/renunciation-and-ostentation/