Parte 1, Artículo
Un mes de cambios
Hacer del ejercicio un hábito diario
Elige el ejercicio de TU preferencia: Adopta un enfoque racional para tu horario, entorno, capacidades financieras y adapta tu entrenamiento en consecuencia (1). Si vives en una gran ciudad congestionada con un tráfico enorme, puede que no sea factible andar en bicicleta. En su lugar, busca un parque cercano y sal a caminar enérgicamente varias veces por semana. De la misma manera, si no tienes suficiente dinero para pagar un gimnasio, busca un gimnasio al aire libre cerca tuya para hacer ejercicios calisténicos por ejemplo. Hay muchas formas de hacer ejercicio, pero el objetivo es alcanzar o superar la cantidad semanal de ejercicio sugerida.
Planifícate con anticipación: Nadie conoce tu horario mejor que tú. Por lo tanto, intenta encontrar un poco de tiempo para tus sesiones diarias de ejercicio. No te estreses si son breves, ya que incluso pequeñas sesiones de actividad física (tan solo 10 minutos) pueden tener efectos beneficiosos para la salud (2). Por lo tanto, si las condiciones lo permiten, deja el coche aparcado en casa y camina o pedalea en bicicleta hasta tu oficina. Una vez que llegues a trabajar, abróchate bien la mochila y sube varias escaleras en lugar de presionar un botón en el ascensor. Asegúrate de intercalar tu tiempo de trabajo con alguna forma de actividad física breve. Esto no solo beneficiará tu salud, sino que también mejorará tu productividad en el trabajo.
No estás solo: Si sientes que te estás quedando atrás, busca un compañero de entrenamiento que te ayude a alcanzar tus objetivos fitness. Este también puede ser tu momento para socializar y aprovechar el apoyo tan necesario que te puede brindar otra gente. En caso de que necesites autoimponerte una obligación para hacer ejercicio, regístrate en alguna clase de actividades grupales como spinning o danza. De esta manera, tendrás un horario regular de ejercicios por adelantado y será más probable que te adhieras a él. De igual manera, existen numerosas aplicaciones diseñadas específicamente para pacientes con cáncer que los ayudan a establecer y dar seguimiento a objetivos de fitness. ¡Usa la tecnología a tu favor!
Haz del fitness algo divertido: Tu rutina de entrenamiento debe ser divertida y atractiva (3). Para evitar el aburrimiento y saltarte las sesiones, cambia tus entrenamientos. Evita hacer lo mismo en días consecutivos. En su lugar, diversifica tus entrenamientos o entornos regularmente. Una semana podría ser algo así. Lunes: caminar a buen ritmo durante 30 minutos en el parque; martes: pedalear en bicicleta hasta el trabajo (aproximadamente 15 km, es decir, unos 30 minutos de ciclismo); miércoles: entrenamiento de calistenia en el parque (30-45 minutos); jueves: clase de spinning (1 hora); viernes: ir caminando hasta el trabajo (aproximadamente 45 minutos); sábado: salir a pasear por un espacio natural (2 horas); domingo: entrenamiento de fuerza en casa con bandas de resistencia, pesas rusa o mancuernas (30-45 minutos).
Autor: Nemanja Lakicevic
Referencias
- Jones, F., Harris, P., Waller, H., & Coggins, A. (2005). Adherence to an exercise prescription scheme: the role of expectations, self‐efficacy, stage of change and psychological well‐being. British journal of health psychology, 10(3), 359-378.
- Jakicic, J. M., Kraus, W. E., Powell, K. E., Campbell, W. W., Janz, K. F., Troiano, R. P., ... & 2018 Physical Activity Guidelines Advisory Committee. (2019). Association between bout duration of physical activity and health: systematic review. Medicine and science in sports and exercise, 51(6), 1213.
- Lakicevic, N., Gentile, A., Mehrabi, S., Cassar, S., Parker, K., Roklicer, R., ... & Drid, P. (2020). Make fitness fun: could novelty be the key determinant for physical activity adherence?. Frontiers in psychology, 11, 577522.